Tras el confinamiento a que nos ha obligado el COVID-19, la reapertura de los museos -y de tantos otros establecimientos- devuelve la normalidad (progresiva) a nuestras vidas. Necesitamos volver a recorrer nuestras calles y comercios; tomarnos de nuevo el café en el bar de siempre; encontrarnos y comentar los partidos de fútbol; ir al cine y al teatro; acudir a las bibliotecas y a los museos, abrazar a seres queridos… Son tantos los aspectos cotidianos que llenan nuestras vidas, que hemos necesitado una crisis sanitaria como esta para darnos cuenta de lo importante que resulta su presencia en nuestro día a día. Pero, sobre todo, necesitamos reflexionar; dedicarnos un tiempo para pensarnos y ver qué vida queremos; cuál es el futuro que deseamos construir y por el que merece la pena luchar.

Como el resto de museos de nuestra ciudad, el Museo Escolar de Pusol abre de nuevo sus puertas, que han permanecido cerradas durante tres meses. Volvemos con el optimismo y con el ímpetu que nos caracteriza, retomando el trabajo y llenando de actividades un calendario ya de por sí cargado de ilusión, del que iremos informando.

Nada de lo que se hace en el museo, en ningún museo, tendría sentido si no llega a nuestras vidas. Como siempre, os necesitamos, ahora más que nunca; todos/as nos necesitamos. Se abre un escenario incierto en el que, pese a todo, no debemos olvidarnos de la cultura, que nos convierte en seres humanos y nos hace libres. Falta nos hace.

Autor: Rafael Martínez, director del Museu Escolar.